Los farmacéuticos abulenses se convertirán a partir de ahora en "agentes de detección y prevención" de violencia de género, además de dar una atención inmediata y personalizada a las víctimas. Lo harán en virtud del acuerdo de colaboración firmado entre el Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León y la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades.
Este programa de formación especializada arrancó el pasado miércoles 4 de octubre en la provincia de Ávila de la mano de Susana de la Torre, psicóloga especializada del servicio de atención a víctimas de violencia de género de la Dirección General de la Mujer de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades.
La presidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Ávila, Inés Barco, explicó a esta redacción que se abordaron todos los asuntos vinculados a este tipo de violencia. Entre ellos, cuáles son las pautas que permiten detectar los signos y síntomas de los malos tratos o los protocolos de actuación que debe seguir el farmacéutico.
Para Inés Barco este tipo de acciones cobran especial relevancia en el ámbito rural, donde la farmacia es en muchas ocasiones el único punto sanitario próximo al paciente. En este sentido, más de 10.000 personas entran cada día en las 133 oficinas de farmacia de la provincia de Ávila. A partir de ahora, las farmacias de Ávila lucirán el distintivo ‘Objetivo Violencia Cero’.