La Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Ávila ha dado la razón a UGT tras denunciar a Correos por vulnerar derechos básicos de los carteros rurales en la provincia de Ávila. De esta forma, Correos deberá comunicar por escrito a los carteros los cambios que supongan prestar servicios en lugares distintos de los que tienen asignados.
La Federación de Empleados de Servicios Públicos de UGT denunció, el 18 de mayo, las condiciones que vienen sufriendo los carteros rurales, con especial atención a los recargos y la obligación de realizar funciones de otros, como por ejemplo, con ocasión de vacaciones.
Según denuncian los propios trabajadores, esta situación conlleva necesariamente la reorganización de los servicios y la modificación de las obligaciones del puesto de trabajo. Francisco José Muñoz García, secretario de organización de UGT de Ávila, explicó a esta redacción que los carteros se ven obligados a recorrer más kilómetros al día o salirse del recorrido habitual que figura en la Hoja de Servicios. “Existe el consiguiente riesgo de que en caso de accidente, no sea reconocido como de trabajo”, recordó.
En este sentido, la Inspección de Trabajo ha constatado que las modificaciones de los recorridos que hace de forma unilateral Correos no quedan reflejadas en las Hojas de Servicio de los carteros rurales. Por ello piden a la entidad postal que cumpla lo establecido en el Estatuto de los Trabajadores, y más en concreto en su artículo 8.5 y en el III Convenio Colectivo.
Aunque la Inspección de Trabajo ha dado la razón al sindicato en este punto, no considera que los hechos denunciados supongan una modificación sustancial de las condiciones de trabajo, ya que para ello habría que obtener una sentencia del Juzgado de lo Social de Ávila.
Francisco José Muñoz García denuncia que Ávila se encuentra “a la cola” de Europa en lo que respecta al número de carteros por habitantes, ya que cada empleado público se encarga de ofrecer el servicio postal a 902 ciudadanos. “Teniendo en cuenta este dato, cada cartero rural tiene que recorrer a diario más de 100 kilómetros y atender un mínimo de 20 localidades”, explicó.
Por otro lado, Muñoz García recordó que el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Ávila ha fallado a favor de la empleada de Correos de Ávila que fue despedida en abril de 2017 alegando que no había pasado el periodo de prueba.
La sentencia condena a Correos por postergar las contrataciones y a indemnizar a la trabajadora con 986 euros por los contratos que debió realizar. La situación afectaba a una de las cuatro bolsas de empleo que tiene Correos en Ávila, concretamente la de Atención al Cliente y que está formada por 20 personas. La empleada en cuestión ocupaba el puesto 17, quedando postergada hasta en 14 ocasiones.
La sentencia condena a Correos por postergar las contrataciones y a indemnizar a la trabajadora con 986 euros por los contratos que debió realizar. La situación afectaba a una de las cuatro bolsas de empleo que tiene Correos en Ávila, concretamente la de Atención al Cliente y que está formada por 20 personas. La empleada en cuestión ocupaba el puesto 17, quedando postergada hasta en 14 ocasiones.