A pesar de las lluvias de estas últimas horas, no son suficientes para las necesidades actuales de consumo humano y para continuar con la actividad de agricultores y ganaderos. Esta situación compromete la futura campaña de riego y repercute en la escasez de pastos para el alimento de ganado y las plantaciones de secano.
Hoy hemos hablado con José Miguel Viñas, meteorológo de Meteored, comunicador científico y responsable de la página web divulgameteo.es, quien nos ha adelantado que se trata de un invierno muy anómalo por la escasez de precipitaciones, y la falta de nubes en la mayoría de los días. Esto es debido a que se instala en la Península un sistema de altas presiones, que se va reforzando algunos días y que se mantiene en el tiempo. Es llamativo que hace un año nos enfrentábamos a la borrasca Filomena, que nos dejaba copiosas precipitaciones en forma de nieve y bajas temperaturas. El meteorólogo considera que ya estamos viviendo una sequía hidrológica, que está afectando más a las cuencas del Guadiana y del Guadalquivir, y aunque el nivel de reservas de las cuencas del Duero, no están tan críticas, siguen bajando día a día. "Las previsiones no son alentadoras, ya que la tendencia apunta a que la situación se va a mantener hasta la primera quincena de marzo", ha avanzado Viñas. "Esto no significa que no vaya a llover de forma puntual", como ha ocurrido en el pasado fin de semana, pero "no se mantendrán en el tiempo". "El invierno continuará siendo seco", según la predicción que manejan. Viñas insiste en que tenemos que pensar en que se agravará la sequía, no sólo durante este año.
Hoy hemos hablado con José Miguel Viñas, meteorológo de Meteored, comunicador científico y responsable de la página web divulgameteo.es, quien nos ha adelantado que se trata de un invierno muy anómalo por la escasez de precipitaciones, y la falta de nubes en la mayoría de los días. Esto es debido a que se instala en la Península un sistema de altas presiones, que se va reforzando algunos días y que se mantiene en el tiempo. Es llamativo que hace un año nos enfrentábamos a la borrasca Filomena, que nos dejaba copiosas precipitaciones en forma de nieve y bajas temperaturas. El meteorólogo considera que ya estamos viviendo una sequía hidrológica, que está afectando más a las cuencas del Guadiana y del Guadalquivir, y aunque el nivel de reservas de las cuencas del Duero, no están tan críticas, siguen bajando día a día. "Las previsiones no son alentadoras, ya que la tendencia apunta a que la situación se va a mantener hasta la primera quincena de marzo", ha avanzado Viñas. "Esto no significa que no vaya a llover de forma puntual", como ha ocurrido en el pasado fin de semana, pero "no se mantendrán en el tiempo". "El invierno continuará siendo seco", según la predicción que manejan. Viñas insiste en que tenemos que pensar en que se agravará la sequía, no sólo durante este año.
En nuestra provincia se ha observado que la intensidad en los periodos de precipitaciones ha ido aumentando en los últimos años, es decir, que cuando llueve lo hace de forma más intensa y en muy poco tiempo, bien sea en forma de granizo o de lluvia. “Esto conecta muy bien con el cambio climático y el calentamiento global, porque el aire está cada vez más caliente y hay más energía disponible, y cada vez que llega una tormenta o un frente, ese proceso se intensifica por esa mayor energía que da el aire caliente, por lo que los fenómenos serán cada vez más drásticos”, nos explicaba José Miguel Viñas.
No obstante, el invierno nos está dejando temperaturas nocturnas muy bajas y esto es debido a que "cuando el cielo está tan despejado es común que el enfriamiento nocturno sea más acusado, y más teniendo en cuenta la altitud de la Meseta Norte, provocando que se produzcan heladas importantes". No obstante, las heladas que se están registrando no forman parte de un temporal de aire frío, "es simplemente que el aire no se mueve durante varios días". Otro factor anómalo es la intrusión de partículas de polvo durante el invierno, que suelen ser más comunes en las Islas Canarias y durante el verano, pero "debido al anticiclón, en este invierno estamos sufriendo estos episodios también", ha concluido Viñas.