La Policía Nacional ha identificado en Ávila a una pareja de ciudadanos de Europa del Este, como autores de uno de los denominados ‘hurtos cariñosos’, ocurrido en la capital. La víctima resultó ser un hombre de avanzada edad al que abordaron inicialmente preguntándole por una calle, para posteriormente escenificar su “agradecimiento” con abrazos y caricias en las muñecas y la espalda, momento que aprovecharon para sustraerle el valioso reloj de oro que portaba.
Tras su identificación plena por parte de los agentes encargados de la investigación, la autoridad judicial ha ordenado una orden de búsqueda nacional, dada la altísima movilidad con la que actúan ambas personas, que cuentan con numerosos antecedentes, y a las que se vincula con un grupo criminal altamente especializado que actúa en numerosas provincias.
Este ‘modus operandi’ sufre algunas variaciones, pero principalmente se trata del ofrecimiento de favores sexuales o de solicitar información sobre lugares de la ciudad, o similares, buscando siempre alguna excusa para abrazar y manosear a las víctimas.
En el argot policial, esta forma delictiva es denominada hurto por el procedimiento del ‘abrazo’, ‘hurto cariñoso’, o ‘zalameras’ pese a que en ocasiones, han llegado a convertirse en robos con violencia para vencer la resistencia de las víctimas. Estos hurtos son cometidos, en la mayoría de las ocasiones, por mujeres jóvenes ayudadas por hombres que se mantienen en un segundo plano, y que se encargan de trasladarlas en coche, y que permanecen en las inmediaciones para ayudarlas a huir si son descubiertas.
Las víctimas suelen ser personas especialmente vulnerables por razón de su edad, salud o de su estado físico (preferentemente abordan a personas de edad muy avanzada o con algún tipo de minusvalía) tratando de minimizar las posibilidades de ser identificados o detenidos. Su objetivo principal es la sustracción de objetos fabricados en oro, como cadenas, medallas, cruces, colgantes, y como ha ocurrido en esta ocasión en Ávila, relojes.
En la mayoría de los casos, los autores son miembros de grupos itinerantes de Europa del este, y actúan en solitario o en parejas formadas por dos mujeres, contando siempre con el apoyo de una tercera persona que conduce un vehículo para facilitar tanto la huida como el acceso a todas las zonas de la ciudad a la que se desplazan.
La Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía y Cruz Roja, organizaron en Ávila el pasado día 3 de marzo, una jornada de formación a voluntarios de esta organización que trabajan con personas mayores, en la que se explicaron las modalidades delictivas que de manera más común afectan a este colectivo ciudadano, incidiendo en los hechos que con mayor frecuencia se están cometiendo como hurtos amorosos, el secuestro virtual, los falsos revisores, etc.