El patio del colegio Salesianos de Arévalo ha sido el escenario de la ‘Operación Bocata’, a la que acudieron más de 2.000 participantes de todos los centros educativos de la ciudad. Un año más, y ya suman 24, la comunidad educativa arevalense respondió a la llamada de la Campaña contra el Hambre que organiza cada febrero la ONG Manos Unidas. Este año, los fondos conseguidos se destinarán a la financiación de mejora de la atención sanitaria a poblaciones rurales Bellary, al sureste de la India proyecto del que se beneficiarán, directamente, más de 3.000 personas, e indirectamente, unas 15.000.
El reparto de los bocadillos, que elaboraron voluntarios, fue a media mañana entre los alumnos de Infantil y Primaria, y a última hora para los alumnos de los institutos por un precio de tres euros. Los bocadillos eran de chorizo y salchichón, más las 100 tortillas de patata cocinadas por la asociación ‘El Castillo’ y por voluntarios de las AMPAS de los colegios e institutos, y personas anónimas de Arévalo. Además, también diversas empresas participaron en este evento solidario, donando parte de sus productos.
Ana Isabel Velázquez, profesora de religión del IES Eulogio Florentino Sanz, explicó a esta redacción que la Operación Bocata es el punto final de toda una semana de trabajo con los alumnos de los centros educativos. Semana en la que, por medio de distintas actividades, como la visita a los colegios de un misionero, conocen el proyecto y los resultados de las iniciativas de años anteriores de Manos Unidas y que ya se han convertido en realidades solidarias.